miércoles, 12 de enero de 2011

soledad es hablar con un grito y llorarle

Hoy está siendo un día normal sin importancia alguna. 
Ayer no tuve muy buen día, digamos que ya me levanté con el pie izquierdo y que con el paso de las horas las cosas se fueron torciendo y acabó pasando lo de siempre, que cuando tengo ganas de seguir adelante un millón de cosas pasan de repente y me vuelvo a desmoronar. Por suerte, estoy rodeada de buenísimas personas que siempre están dispuestas a escucharme y a hacer lo que sea. Y hoy ya, no me encuentro con demasiadas ganas, pero ya voy a intentar llevar a cabo algo que yaiza y yo nos hemos prometido mutuamente. Y poco más que contar. Ayer con todo el bajón escribí demasiado, y pensaba en ir subiendo trozos y tal, pero no creo que sea muy buena idea, ya que en algunas ocasiones me arrastro bastante y hago demasiadas súplicas...  Tengo cuatro exámenes la semana que viene, ¿podré concentrarme? Eso ya lo veremos, de momento tengo que intentar llegar con buen paso a mañana y eso ya me parece algo bastante complicado. Me exijo demasiado, quizás porque sé que no me merezco nada de esto después de todo lo que he dado, puede sonar a orgullo, pero es lo que pienso cuando intento defenderme de mí misma y de mis arrebatos. 
Pedirte que vuelvas una vez tras otra, ¿acaso puedo hacer algo más? Ni si quiera me escucharás.
Como me gustaba mi sonrisa, y la tuya...
Me encantaba dormir contigo, 
abrazarte y escuchar tu corazón.

2 comentarios:

  1. uhhhhhhhhhhhhhhhhhh solo te digo una cosa, HAGAMOS EL GORILA!

    ResponderEliminar
  2. Todos los dias son relevantes. TOdos te hacen aprender algo nuevo, aunque sea que muchos dias para ti no tengan relevancia xD

    ResponderEliminar